Me hablan y me hablan de vos... me advierten de tí, me previenen. Avisoro tu juego, tu intento de mover las piezas, solo basta ver el tablero para saber cuál será tu siguiente paso.... ya te comiste a la torre homérica por mucho tiempo y sigues disfrutando de ella, y ella que no se da cuenta que no sobrevivirá si sigue en tus terrenos....el oblicuo alfil te ronda, te persigue, cree cazarte y rehuyes a su color, pero juegas con él, lo controlas disfrazada de emparentamiento, mientras él se viste de oveja y espera el momento para atacar..................y por lo pronto quieres jugar también con el rey, sin saber que no por nada ha llegado ahí; que desde su altura te avisora, te vigila, y tú que crees que lo controlas, él solo deja actuar observando tus movimientos hacia un jaque, pero el mate nunca llega..no se si llegue, recela demasiado...conoce tus jugadas.......aunque la niebla del corazón la impida asimilar....